Introducción
Los años difíciles
Los primeros pasos
El despegue
Los nuevos retos
Los tiempos futuros

Edificio Palavicini

En la vida moderna de México, EL UNIVERSAL ha jugado un papel muy significativo, al ser un testigo fundamental del devenir histórico, a partir de 1916, año en que fue fundado por el legislador constituyente, Félix F. Palavicini. Al surgir, ligado a una etapa crucial paralos mexicanos, como sin duda lo fue el despegue de las instituciones del Estado revolucionario, una vez que triunfaron las fuerzas constitucionalistas, se ponía en marcha un poderoso mecanismo que habría de permitir una vida cívica más fructífera, al abrir el debate de ideas con base en una información oportuna, situación que había obstaculizado el recurso de las armas, utilizado cuando no quedó otro camino para acabar con la dictadura porfirista.

    Palavicini, tabasqueño de nacimiento, ingeniero topógrafo, profesión que nunca ejerció por que pudo más su vocación política y de hombre de letras, desde muy jovense dedicó a las lides periodísticas, al fundar en 1907 el diario El Partido Republicano, experiencia que le habria de servir para dirigir, dos años más tarde, un periódico esencial para el movimiento que lideró el coahuilense, don Francisco I.Madero cuyo cabezal demostraba el ideal que perseguían los seguidoresde quien habría de pasar a la historia como el Apóstol de la Democracia. El Antireeleccionista, fue un diario que contribuyó a la propagación de un ideal hoy todavía vigente.

    En la edición de este diario maduró su vocación de periodista de lucha. Cuenta Palavicini en sus memorias que se le fijó un sueldo de seis pesos diarios, por un horario quecomenzaba a las ocho de la mañana y finalizaba a las doce de la noche. Con grandes sacrificios logró adquirirse una rotativa Duplex, la primera de su tipo que vino a México. Muy pronto, El Antirreeleccionista se hizo notar como "enemigo" del regimén porfirista y Palavicinise vio obligado a sufrir las consecuencias: fue acusado de "ultrajes al Primer Magistrado de la Nación", y la imprenta clausurada, exactamente a los dos meses de haber iniciado su vida el periódico oficial del maderismo.

    Su probada visión lo llevó entonces a fundar EL UNIVERSAL "Diario Político de la Mañana", luego de haber estado al frente de la Secretaría de Instrucción Pública, Periódico en el gobierno de Don Venustiano Carranza, el 25 de agosto de 1914 al 26de septiembre de 1916, cargo del que se separó precisamente para poner en marcha al primer gran matutino de la capital de México,una vez restablecida la paz y garantizada la vida institucional con unCongreso que habría de dar vida a la Constitución Generalde la República. Por ello no fue mera coincidencia que la primera edición de nuestra Carta Magna se haya parado en los lonotipos de EL UNIVERSAL, e impreso en la rotativa que hoy se conserva en el recinto de la Cámara de Diputados.

    El "Diario Pólitico de la Mañana"abrió caminos al periodismo de corte moderno, y dio cabida a las principales plumas de la época, caracterizándose desde entocespor una política editorial plural, y un amplio sentido periodístico al crearse diversas secciones, algunas de las cuales han perdurado, como Aviso oportuno el Aviso Oportuno. De hecho, desde sus inicios se delinearon los perfiles informativos que aún conserva, pues ya desde entonces se incluía información de los Estados, policiaca, de sociales y de espectáculos. Los primeros siete años, el ingeniero Palavicinies tuvo al frente de EL UNIVERSAL, aun cuando por su capaciadad y  dote diplomáticas era requerido por el jefe del Ejecutivo en turno, lo que lo obligaba adejar la responsabilidad de su dirección, en periodistas de su confianza,como Luis Manuel Rojas. En 1923, en el mes de marzo, abandona definitivamente el matutino para dedicarse por completo a la vida diplomática.

    Comienza entonces una nueva era del que pasaría a ser "El Gran Diario de México", bajo la dirección editorial y administrativa del licenciado Miguel Lanz Duret, quien adquirió la totalidad de las acciones bajo la razón social de Compañía Periodística Nacional. Fueron años de consolidación, sin abandonar la línea editorial del fundador, quien sentó las bases de un periodismo que reflejara los echos con un estilo ágil y acorde con los reclamos informativos de una época de grandes y vertiginosos cambios. Ello lo patentiza la creación del primer vespertinode América Latina, EL UNIVERSAL GRÁFICO, en octubre de 1922, la revista EL UNIVERSAL ILUSTRADO y de suplementos dominicales impresos en color, innovaciones que muy pronto recibieron la aceptación de los lectores como se advierte por el tiraje de entoces de EL UNIVERSAL, que fluctuaba entre los 75 y 80,000 ejemplares diarios, de acuerdo con auditorías llevadas acabo por el jefe del departamento de circulación,Antonio Hidalgo.

    Sin embargo, es conveniente señalar que la falta de correspondencia entre la aceptación de las publicaciones de esta casa editorial, y la estrategia financiera y administrativa condujo a una gradual e irreversible obsolecencia del equipo y maquinaria con que entonces contaba la empresa. Esta situación se agudizó bajola administración del licenciado y general Miguel Lanz Duret, hijo del sucesor de Palavicini, quien murió a los 51 años, víctimade cáncer, factor que influyó para que no se llevara acabo la, ya entonces, urgente modernización de las instalaciones y los equipos, principalmente rotativas.

    Al morir Miguel Lanz Duret II, el 24 de marzo de1959, se acelera la decadencia de la empresa, tanto por la inercia negativa que se venía arrastrando, cuanto por las exigencias desorbitantes, fuera de realidad, de seis sindicatos que operaban dentro de la empresa, situación por demás anómala, que contribuyó a un más rápido deterioro generalizado de la casa editorial. Sucesivas administraciones, bajo la dirección de doña Francisca Dolores Valdés viuda de Lanz Duret, se mostraron incapaces de poder hacer frente a una situación que demandaba soluciones de fondo, además de fuertes inversiones de capital fresco.

Fotografía de la señora F. Dolores Valdés

    Ni una ni otra cosa se dieron, y durante una década "El Gran Diario de México" sobrevivió en condiciones cada vez más precarias. A la obsolescencia del equipo se sumaba entonces una enorme serie de vicios laborales, surgidos bajo el amparode una vida sindical distorsionada y avasallante que literalmente hacía imposible un elemental saneamiento de la empresa. Como muestra de esta difícil realidad, baste señalar que a la empresa solo se le permitían sólo cinco empleados no sindicalizados: dos secretariasde la dirección general, dos choferes y un secretario privado. Es oportuno apuntar asimismo que los titulares de las plantas raras veces laboraban, aun cuando sí cobraban su salario ya que contaban con sustitutos-cuijes-a quienes les pagaban conforme a reglas ajenas a la empresa.

    En tales circunstancias, por demás desfavorables,se presenta la disyuntiva de liquidar la empresa, terminar con la vida del periodíco o permitir la participación de capitales nuevos. Es entonces, el 23 de octubre de 1969, cuando entra a escena el licenciado Juan Francisco Ealy Ortiz. En reunión del Consejo de Administración celebrada ese día, fue ratificado como gerente general, cargo que venía desempeñando desde dos años antes, y nombrado por decisión unánime Director General.

    Cómo logró dar este paso lo relatadon Nazario S. Ortiz Garza, tío del licenciado Ealy Ortiz, en su libro de memorias titulado Remembranzas, editado en 1991 por la Fundación de Investigaciones Sociales A.C.

    Luego de referirse al parentesco que los ligaba estrechamente, y de mencionar los pasos iniciales de su sobrino en la CompañíaPeriodistíca Nacional, relata:

Un dia fue a verme, hablamos de negocios. Me planteó sus ideas y me mostró sus posibles soluciones; también me pidió que fungiera como aval para solicitar un crédito de una de las instituciones financieras del país. Su arrojo, su conocimiento de las cosas, el anális que presentó del problema me dieron confianza y lo apoyé. Pronto logró la recuperación del periódico y cubrió totalmente el crédito, y ahora dirige uno de los más importantes diarios de México y América Latina.

    Al recibir esa responsabilidad, el licenciado Ealy Ortiz comenzó una etapa de renovación y cambios que fácilmente se pueden conceptuar de espectaculares. Hacer un recuento histórico de cómo se llevaron a cabo, es el tema de este libro que ponemos a disposición del lector interesado en el devenir del periodismo en México. Son cinco lustros en los que con visión y voluntad, fue posible sacar de su postración y decadencia al periódico decano de la capital de la República.

Indice Los años difíciles