Como podemos observar la consanguinidad es muy alta en ambos linajes y es de vital importancia romperla para que llegue a tener éxito el Plan de Recuperación.  Esto sólo se podrá lograr con el uso de nueva sangre que se puede obtener cruzando linajes diferentes  con el fin de buscar la heterocigosis y una mayor capacidad adaptativa genética de los animales a reliberar, estos linajes serían L-SJA y el Linaje Arizona Sonora Desert Museum-Ghost Ranch.  De lo contrario seguirá aumentando la consanguinidad, empeorando el fenómeno llamado cuello de botella, como sucederá si se cruzan el macho 34 y la hembra 88.

   La alta mortalidad perinatal puede ser un indicador de la consanguinidad tan elevada.

   Otra de las alternativas sería realizar cruzas dentro del L-R, con ejemplares que den consanguinidades bajas, por ejemplo:  Las hembras 116, 88 y 98 podrían cruzarse con los machos:  43, 44, 47, 60, 61, 66 y 67 siendo F= 0.1406, o bien con los machos 2, 7, 8, 9 y 12, siendo F= 0.1562 (4).

   Existe una nueva alternativa que se puede manejar, sería utilizar ambos linajes y formar una línea abierta, los ejemplares del L-SJA fueron muestreados desde el año de 1991 y a la fecha no se han dado resultados de las pruebas realizadas para confirmar si son puros o no, lo que ha detenido el poderlo utilizar en el Plan de Recuperación para romper consanguinidad en ambos linajes.

   Parte del éxito reproductivo, deducimos se debe a la alimentación, al manejo realizado, lo funcional de ambos albergues y el buen estado de salud de los reproductores.

   Otro aspecto importante es la forma en que una persona se encarga de dar alimento a cada animal, esto evita manejos físicos y es de gran ayuda para dar tratamiento orales, ya con la seguridad de que el animal lo ingiere.

AGRADECIMIENTO

Los autores agradecen a la P. de Biól. Carmen B. Vázquez por su valiosa cooperación para la realización del presente trabajo.