Nació
en Tepeji del Río, Higalgo, en 1845; murió en la ciudad
de México en 1901.
A los 12 años se radicó en la capital de la República.
Estudió en los colegios de San Juan de Letrán y de San Ildefonso,
y en las escuelas de Jurisprudencia y Medicina, al tiempo que daba clases
particulares para ganarse el sustento. Enemigo del imperio de Maximiliano,
se
exilió en La Habana, pero volvió al triunfo de la República,
graduándose de abogado en 1868, mientras era bibliotecario y archivista
en la Escuela Nacional de Agricultura. Fue jefe de redacción de
la Secretaría de la Cámara de Diputados (1869-1870), oficial
mayor del gobierno del Distrito Federal durante las administraciones de
Chavero, Castro y Montiel (1871-1873), juez del Registro Civil (1873-1878),
fundador de un colegio particular con primaria y preparatoria (1879),
y regidor de Instrucción Pública de Tacubaya, Distrito Federal
(1887), en cuya ocasión implantó en las escuelas de ese
municipio el positivismo. Convertido en educador, enseñó
pedagogía (1889-1901) en la Escuela Normal, llegando a ser su director
(1890-1894), también fue director en 1890 de la Escuela Nacional
Preparatoria, y representó a San Luis Potosí, Tlaxcala y
Baja California en distintos congresos sobre educación.
Recién recibido, fue redactor de El Siglo XIX y de El Porvenir.
Fundó Miscelánea
Hispanoamericana y El Publicista, semanario de derecho constitucional,
administrativo e
internacional; con los jóvenes Rafael de Alba, Daniel M. Vélez
y Rafael Aguilar y Santillán, la Sociedad Científica Franklin,
que con el tiempo se convirtió en la Sociedad Científica
Antonio Alzate (hoy Academia Nacional de Ciencias Antonio Alzate); más
tarde un Boletín Bibliográfico y Escolar y, con enormes
sacrificios pecuniarios, la Biblioteca Pública Romero Rubio en
Tacubaya. Sostuvo una polémica sobre la filosofía de Hegel,
contra José María Vigil y Porfirio Parra, en el Liceo Hidalgo.
Además de sus artículos periodísticos, escribió
sobre teatro: Isabel Lopouloff, El precio de un secreto, Amigos peligrosos
Mundos reales; filosofía: La filosofía hegeliana y Diálogos
socráticos. Sobre sociología: Ensayo sobre la clasificación
de las ciencias. Sobre economía: Calendario del obrero del porvenir
y Economía Política. Y sobre temas científicos: Nociones
científicas, Texto de Geometría y Consideraciones sobre
la biogenia. También realizó una colección de Coros
Escolares. Notable pedagogo, educó a un grupo considerable de adolescentes,
poniendo especial énfasis en la formación de su carácter.
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Fuentes
Secundarias:
Meneses Morales, Ernesto, Tendencias Educativas Oficiales en México,
1821 - 1911, México, Universidad Iberoamericana, p. 787.
Diccionario Porrúa, México, 1983, p. 481 - 483.
Enciclopedia de México (cd), México, Secretaría de
Educación Pública, 1999.
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