La
feminización del magisterio se refiere a un proceso mediante el cual
las mujeres se fueron incorporando, paulatinamente, al trabajo docente.
La enseñanza se estableció así como lugar de trabajo
femenino. Una primera evidencia de este proceso se expresa en el aumento
gradual y sostenido de maestras, dentro de las escuelas primarias, a lo
largo del siglo XIX y XX. De manera reciente, la feminización del
magisterio parece seguir una escalada hacia los niveles de educación
secundaria y media en los países iberoamericanos. La presencia mayoritaria
de mujeres en las escuelas de educación elemental se relaciona con
la identificación social de la enseñanza con lo que se considera
"los atributos propios de la mujer", dentro de los cuales se cuentan
la ternura y el "natural" deseo de servir. Este conjunto de representaciones
sociales, que articulan de manera indisoluble el ejercicio del magisterio
con estereotipos femeninos, han contribuido a menospreciar las actividades
intelectuales y creativas ligadas a la docencia, a justificar los bajos
salarios que de manera histórica han acompañado al trabajo
docente y, a minimizar la importancia social de esta profesión en
contraste con otras profesiones masculinizadas. |
Término
elaborado por Guadalupe García Alcaraz, Op. cit |